Siempre que voy a ver una película voy ideando como voy a reseñarla... con Heres Comes The Boom si que me equivoque en todas mis ideas preconcebidas.
Desde el inicio de la película se nota que Kevin James buscó librarse de todos esos "cliches" de que se ha rodeado al hacer papeles de "buena-gente-inocente-noble-rayando-en-lo-tonto" de casi todas sus películas. En esta película no hay otro personaje principal que lo use como patiño... no, esta vez no.
Scott Voss (Kevin James) es un profesor de biología que a perdido su motivación... al igual que los de toda la escuela con excepción del maestro de música Marty Streb, personaje magistralmente interpretado por Henry Winkler que si no te acuerdas de el por su nombre seguramente lo harás por su cara.
Una mañana el director anuncia que las finanzas de la escuela están en crisis y que han decidido eliminar todas las actividades extra curriculares... como la música. Scott Voss acaba de enterarse que aun los perdedores de esas luchas de artes marciales mixtas reciben una buena paga por lo que decide aventurarse para salvar el curso de música de su amigo Marty.
Una buena película que me sorprendió gratamente, cuando lo que buscaba era aburrirme y conciliar el sueño en una noche de lunes.
La música ronda cada segundo de la película y la banda sonora es buena pero debió tener mayor protagonismo aún, pero sin convertirla en Glee ni nada parecido, en mi opinión.
Kevin James participó como co-escritor en el guión, creo que tenía muy claro que quiería un papel diferente para el.
Soy muy fan del lema de la película... "Sin música la vida sería un error" de Friedrich Nietzsche.
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